Tras 18 años de encarcelamiento injusto, Alex Guzmán es liberado con el
plan perfecto para descubrir quién mató a su hermana Sara y por qué la
familia Lazcano lo culpó del crimen. Lo que no sabe, es que la búsqueda
de pruebas lo llevará por un desvío mucho más peligroso de lo que
imaginaba. Cuando finalmente se enfrente al verdadero culpable, Alex
deseará no haber buscado su venganza.